
En su primer año de gobierno, Andrés Manuel López Obrador (AMLO) no pudo contener, mucho menos revertir, la crisis de inseguridad de México. Como examiné la semana pasada, la violencia criminal es uno de los dos principales lastres que ya desgasta la popularidad del presidente y su administración. El otro son los malos resultados económicos de su gestión. El mandatario y su equipo han recurrido a artimañas (aún más burdas que las que han empleado en el tema delictivo) para enmascarar esta realidad. Sin embargo, sus acciones han fallado en persuadir a mercados, inversionistas e incluso consumidores. Estos tres sectores han demostrado constituir un auditorio mucho más difícil de convencer que la opinión pública en general. Son un hueso duro de roer, que desde un principio ha indigestado al nuevo gobierno.
El 1 de diciembre de 2019, AMLO habló de la situación económica del país en el evento conmemorativo de su primer aniversario de gestión. No le quedó más remedio que reconocer que “todavía no ha habido crecimiento económico como deseamos.” La frase es, sin embargo, engañosa. Durante el primer año de este gobierno, México no solo no ha tenido el crecimiento “deseado,” sino que no ha tenido ningún tipo de crecimiento. La economía nacional simple y llanamente se encuentra estancada. Está muy lejos del objetivo de 4% de crecimiento anual promedio para el sexenio y aún del 2% comprometido por el propio presidente para este año.
Malos Resultados Económicos no Vienen del Pasado
AMLO ha atribuido la persistencia de la violencia criminal a la inercia. Ha dicho que se trata de un problema heredado, del cual su gobierno es responsable, pero no culpable. Sin embargo, no puede usar ese argumento en el tema económico. No puede acusar al pasado de la parálisis económica. En los tres primeros trimestres de 2018 la economía mexicana creció 2.4%. En tanto, en el mismo periodo de 2019 (ya en su gobierno) el crecimiento fue de 0%. De haber un patrón inercial, la economía habría crecido en alrededor de 2% en ese lapso. Pero no lo hubo. O bien algo o (más propiamente) alguien lo rompió.
Tampoco puede achacar el problema al exterior, dado que la economía de Estados Unidos (principal socio comercial de México) creció en ambos periodos. Aumentó 3% y 2.3% en los tres primeros trimestres de 2018 y 2019, respectivamente.
Por tanto, si aplicamos su razonamiento sobre la inseguridad, aunado a la evidencia que examinaré más adelante, podemos concluir que el gobierno de AMLO es responsable y también culpable de los malos resultados económicos de su primer año de gestión.
En el evento conmemorativo, a pesar de reconocer el estancamiento, el mandatario no resistió la tentación de presumir supuestos logros económicos. Pero lo hizo basado en datos que inducen a engaño. Así ocurrió cuando habló de la generación de empleos, la inversión extranjera, la paridad peso-dólar y el desempeño de la bolsa de valores.
Desplome en Creación de Empleos
AMLO dijo que en lo que va del año se han generado 648 mil nuevos empleos, según datos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). En efecto, el registro más reciente del IMSS indica que de enero a octubre de 2019 se crearon 648,059 plazas de trabajo. Sin embargo, el detalle aquí es que este gobierno comenzó el 1 de diciembre de 2018, no el 1 de enero de 2019. (Por esta obviedad, la conmemoración del primer aniversario de gestión se realizó precisamente el 1 de diciembre de 2019).
Entonces el plazo apropiado de análisis debe ser del 1 de diciembre de 2018 al 31 de octubre de 2019. (De hecho, lo ideal sería hacer el corte a noviembre de 2019, pero ese dato aún no se da a conocer). Si se hace el cálculo sobre esos once meses, no resultan 648,059 nuevos empleos, sino una cifra mucho menor. Son 269,498, apenas el 45% de los 600,188 empleos generados durante el mismo periodo anterior (diciembre 2017-octubre 2018). Es decir, esta cantidad habla más de fracaso que de un gran logro.
De ahí la necesidad de recurrir a una estimación engañosa para encubrir la realidad y, al mismo tiempo, apuntalar el triunfalismo del presidente.
En otro caso semejante, el mandatario afirmó que en los primeros meses de 2019 se captaron 26 mil millones de dólares de inversión extranjera. Es “la cifra más alta en la historia del país,” aseguró. Esta cifra surgió de un boletín sobre Inversión Extranjera Directa (IED), que emitió la Secretaría de Economía de México este 19 de noviembre.
Cayó Inversión Extranjera
Según ese comunicado, de enero a septiembre de 2019 el flujo de entrada (inversión extranjera que llega al país) fue de 33,358.1 millones de dólares. En tanto, agrega, el flujo de salida (inversión de mexicanos que va al exterior) fue de 7,302.5 millones de dólares. Restar el flujo de salida al flujo de entrada arroja una IED neta de 26,055.6 millones de dólares. Esto es, los 26 mil millones mencionados por el mandatario.
El boletín compara esa cantidad con la IED del mismo periodo anterior (enero-septiembre 2018), que fue de 24,174.3 millones de dólares. Bajo ese cálculo, se observa un incremento de 7.8%. El comunicado aclara un punto importante: todas esas cifras son preliminares. Adicionalmente, la IED que difunde la Secretaría de Economía son inversiones que le reportan en el periodo del que informa, pero que no necesariamente ocurren en ese lapso.
Sin embargo, hay una fuente que sí registra con precisión los montos y momentos en que llegan y salen las inversiones productivas del país. Es el Banco de México (Banxico). Pues bien, de acuerdo con Banxico, de enero a septiembre de 2019 el flujo de entrada de IED fue de 26,056 millones de dólares. (No los 33,358.1 millones de dólares reportados por la Secretaría de Economía). Esa cantidad tampoco fue la “más alta en la historia del país.” Al menos fue claramente inferior a la registrada en el mismo periodo anterior (enero-septiembre de 2018), que ascendió a 27,117 millones de dólares.
Más Inversiones Mexicanas Dejan el País
El lapso enero-septiembre de 2019 sí superó al mismo periodo previo en otro aspecto de la IED. Pero fue en sentido negativo, no positivo. Se trata del flujo de salida. En ese periodo, inversionistas mexicanos decidieron sacar 8,530 millones de dólares para invertirlos en el extranjero. En cambio, en los primeros nueve meses de 2018 salieron 7,225 millones de dólares. De esta manera, la IED neta de enero-septiembre de 2019 llegó a 17,518 millones de dólares. Fue casi 12% menos que la de enero-septiembre de 2018 (19,892 millones de dólares).
Esto significa que con este gobierno tiende a llegar menos inversión extranjera y a salir más inversión mexicana, en comparación con la administración anterior.
Asimismo, AMLO aseguró que “el peso se ha fortalecido 4% con relación al dólar y la Bolsa de Valores se ha apreciado en 2%.” Ambas cifras también son engañosas. Datos de Banxico indican que la cotización del promedio compra-venta del dólar interbancario del 30 de noviembre de 2018 fue de 20.38 pesos. En tanto, esa cifra ascendió a 19.54 pesos al 29 de noviembre de 2019 (último día hábil de ese mes). La diferencia entre ambas cantidades (84 centavos) significa que el peso mejoró su valor en 4.12% con respecto al dólar. Efectivamente, es el monto de 4% citado por el presidente.
Falso Repunte del Peso y de la Bolsa de Valores
A su vez, el Índice de Precios y Cotizaciones (IPC) es el indicador que mide el desempeño de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV). El IPC llegó a 42,820.18 puntos al cierre de noviembre de 2019, mientras que fue de 41,732.78 puntos al cierre de noviembre de 2018. La diferencia entre ambas cantidades representa un aumento de 2.6% en ese indicador durante el primer año de este gobierno. Es decir, la cifra es incluso ligeramente mayor a la mencionada por el presidente (2%).
Sin embargo, los datos ofrecidos por el presidente tanto de la paridad peso-dólar como del rendimiento de la BMV inducen a engaño. Veamos porqué. En ambos casos, el presidente curiosamente sí incluyó a diciembre de 2019 en el cálculo, cosa que no hizo con los empleos generados.
Pero más allá de eso, el mandatario omitió un elemento previo, bajo su total responsabilidad, que dañó a ambos factores de la economía nacional. Se trata de su decisión de cancelar el proyecto del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM) en Texcoco. El clímax de esta determinación ocurrió en la segunda quincena de octubre de 2018.
En ese lapso, se agudizó el debate público al respecto, a medida que se aproximaba la consulta nacional convocada por AMLO sobre el tema. La controvertida consulta se realizó del 25 al 28 de octubre. Con base en ella, el 29 de octubre el entonces presidente electo anunció la cancelación de la obra. Al día siguiente (30 de octubre), el actual mandatario difundió un video en el que criticó el escándalo que su decisión provocó.
Costosa Cancelación del Nuevo Aeropuerto
Sin embargo, su decisión causó mucho más que “bulla” y “ruido” (según definió, con su habitual desprecio, al rechazo que la medida concitó). Produjo una depreciación del peso frente al dólar de 8.5%. La paridad promedio del dólar interbancario pasó de 18.77 pesos, el 16 de octubre, a 20.36 pesos el 31 de ese mes. También ocasionó una baja de 12.14% en el IPC. El indicador bursátil cayó de 49,504.16 puntos del cierre de septiembre a 43,492.55 puntos del cierre de octubre de 2018.
El impacto negativo de la cancelación del NAICM en ambos indicadores fue reconocido hasta por Gerardo Esquivel, uno de los economistas más cercanos a AMLO. (El mandatario colocó, vía el Senado que controla, a Esquivel como Vicegobernador de Banxico y nombró a Graciela Márquez, esposa de Esquivel, Secretaria de Economía). Esquivel admitió que la decisión de anular el proyecto “favoreció” al nerviosismo del mercado cambiario y de valores (Reforma, 30/11//2018). Era imposible que no lo hiciera. En octubre de 2018 no ocurrió ningún otro evento relevante que pudiera dañar a tal grado a la paridad peso-dólar y a la BMV.
Lo que procede entonces es contrastar el comportamiento de estos indicadores previo a la cancelación del NAICM con lo que va del gobierno de AMLO. Comparado con su valor en octubre de 2018, el dólar interbancario de fines de noviembre de 2019 fue 4.12% todavía más caro. Se cotizó en promedio en 18.77 pesos el 16 de octubre de 2018 contra 19.24 pesos del 29 de noviembre de 2019. De la misma manera, el IPC de noviembre de 2019 (42,820.18 puntos) fue 13.5% inferior a su nivel de septiembre de 2018 (49,504.16 puntos).
Ni el Peso ni la Bolsa se han Recuperado
Esto quiere decir que tras un año de los supuestos logros reportados por el presidente, la realidad es que ni el peso, ni la bolsa de valores se terminan aún de recuperar de su costosa decisión de cancelar el NAICM.
La propensión de este gobierno a falsear información para apoyar su triunfalismo económico ya se había exhibido en días previos. En conferencia de prensa de AMLO del 26 de noviembre, se anunciaron 147 proyectos de inversión privada para infraestructura nacional en los siguientes cinco años. La presentación estuvo a cargo de Alfonso Romo, principal enlace del presidente con el empresariado mexicano, y Carlos Salazar, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE). Salazar dijo que estos proyectos representan una inversión de 859 mil millones de pesos (alrededor de 42 mil millones de dólares), cifra que Romo convalidó.
Para empezar, el número de inversiones no llega ni al 10% de las anunciadas por Carlos Slim el 27 de agosto de este año. También en una conferencia de AMLO, ese día el principal magnate mexicano informó que había 1,600 proyectos de inversión privada para infraestructura para este sexenio. Tampoco rebasan el 10% del monto de esas supuestas inversiones que, según la periodista Maricarmen Cortés, era de 420 mil millones de dólares (Excélsior, 26/11/2019).
No Cuadran Cifras de Proyectos de Inversión
Pero, otra vez, más allá de eso, las cifras presentadas este 26 de noviembre son en sí mismas inconsistentes. El monto de los inversiones y el número de proyectos simplemente no cuadran. La foto 1 muestra el desglose utilizado por Salazar durante el anuncio. Si se suman la cantidades de tres de las cuatro columnas, su resultado no coincide con los totales que aparecen al final de ellas. Los resultados discrepantes son de las columnas siguientes. De la 2020 el total es 349,538 (no 431,318), de la 2023-2024 es 104,951 (no 171,711) y por tanto de la Total es 710,482 (no 859,022).

Foto 1: Desglose de los montos de inversión de los proyectos presentados por Carlos Salazar, presidente del CCE. Fuente: https://bit.ly/38kAU7q.
Lo mismo ocurre con el número de proyectos. La foto 2 muestra el desglose del número de proyectos por plazo presentado por Salazar. Aquí tampoco coinciden los resultados de tres de las cuatro columnas. De la columna 2020 el total es 66 (no 72), de la 2023-2024 es 27 (no 34) y por consecuencia de la Total es 134 (no 147).

Foto 2: Desglose por plazo del número de proyectos de inversión presentado por Carlos Salazar, presidente del CCE. Fuente: https://bit.ly/38kAU7q.
Lo foto 3 muestra el desglose del número de proyectos por región usado por Salazar. El caso es similar. Solo que aquí no coinciden los resultados de ninguna de las cinco columnas. De la columna Centro el total es 42 (no 45), de la Norte es 44 (no 49), de la Sur Sureste es 39 (no 42), de la Multiregión es 9 (no 11) y consecuentemente de la Total es 134 (no 147).

Foto 3: Desglose por región del número de proyectos de inversión presentado por Carlos Salazar, presidente del CCE. Fuente: https://bit.ly/38kAU7q.
Nahle Canceló Proyectos por 148.5 Mil Millones de Pesos
De inicio era muy poco probable que esas notorias diferencias se debieran a yerros en la suma de apenas una cuantas cantidades. Después esa escasa probabilidad de error quedó descartada totalmente cuando se conoció el origen de las discrepancias. No hubo equivocaciones. Se trató de algo “más preocupante,” como bien reportó Maricarmen Cortés (Excélsior, 27/11/2019). La periodista informó que las variaciones se deben a un desacuerdo de última hora entre representantes empresariales y Rocío Nahle, Secretaria de Energía.
Producto de la discordia, Nahle dejó fuera del paquete los proyectos previstos para “Energía” y “Energía eléctrica” por 84,980 y 63,560 millones de pesos, respectivamente. Ambos montos suman 148,540 millones de pesos. Esta cantidad constituye la diferencia que existe entre los 859 mil millones anunciados y los 710,482 millones resultantes de los datos de la foto 1. Los diferencia entre los 147 proyectos anunciados y los 134 que se derivan de la información de las fotos 2 y 3 correspondería también al número de proyectos eliminados. Es decir, fueron 13 los proyectos de “Energía” y “Energía eléctrica” que la funcionaria canceló.
Por consiguiente, los proyectos a realizar en realidad representan una inversión de 710,482 millones de pesos, 17% menos que los los 859 mil millones anunciados. Tanto Romo como Salazar conocían la verdadera cifra, dado que ambos encabezaron las negociaciones inherentes al anuncio. Pero como la diferencia no es poca cosa, deliberadamente optaron por no hacer la corrección correspondiente, a efecto de no reducir el impacto del anuncio. Muy probablemente el presidente supo de ello y convalidó la decisión por las mismas razones. (Solo un mandatario blandengue, que AMLO ha reiterado en múltiples ocasiones no ser, permitiría un engaño de ese tamaño sin castigar a los responsables).
Mentir Para Simular Recuperación Económica
Esto significa que el objetivo principal de este episodio era aparentar una supuesta reactivación económica en el país, más que apegarse a la realidad. Es decir, el propósito era simular. Esa palabra con la que el presidente constantemente crítica a gobiernos pasados, pero que también ahora describe una práctica frecuente de su administración.
Sin embargo, conocida la verdad de este episodio, aunada a las motivaciones propagandísticas de este gobierno y al hecho de que el listado de proyectos (ya no digamos sus respectivos desgloses técnicos) no aparece por ningún lado, es obligado observar el tema con mayor cautela. Ni aún las cifras resultantes del número de proyectos (134) y de total de inversión (710,482 mil millones de pesos) pueden darse por ciertas, sino hasta que esta administración demuestre fehacientemente que lo son.
Si para AMLO y su administración es más importante la propaganda, para la ciudadanía lo es conocer la verdad y repudiar la mentira.
En este marco de malos resultados económicos y de intentos del gobierno por encubrirlos, ni aún la expansión del gasto social ha servido para convencer a la sociedad de que la economía va bien. Aunque el 35% de los mexicanos afirma recibir algún apoyo monetario de la nueva administración, hay opiniones divididas sobre la economía (Reforma, 01/12/2019). Mientras el 13% ve en la economía el principal logro de la gestión de AMLO, el 11% lo considera su principal fracaso.
Disminuye Confianza de Consumidores Mexicanos
Incluso se diluye gradualmente el entusiasmo inicial que la administración de AMLO despertó entre la población para adquirir bienes y servicios. Así lo muestra la reducción de la brecha en el Índice de Confianza del Consumidor (ICE) de este gobierno en comparación con el anterior. En el arranque, el diferencial fue de 7.5 puntos (43.8 puntos en diciembre de 2018 vs 36.3 puntos en diciembre de 2017). Después creció hasta 13.5 puntos en febrero de este año (48.8 puntos de entonces vs 35.3 puntos de febrero de 2018). Pero desde aquel momento ha caído hasta llegar apenas a 2 puntos en octubre de 2019 (43.9 puntos de ese mes vs 41.9 puntos en octubre de 2018).
Así, en medio del desgaste ante mercados y empresarios nacionales e internacionales, además de consumidores, por los malos resultados económicos de su gestión, AMLO y su gobierno han iniciado su segundo año de mandato.
Por vacaciones de fin de año, Público y Poder entra en receso. Mas regresará con nuevos contenidos en enero del 2020. Aprovecho la oportunidad para desearles una Feliz Navidad y un Prospero Año 2020. Felices Fiestas !
2 comentarios
Hola amigo , excelente publicación . Felicidades y mucho éxito.
Muchas gracias mi estimado Mario.